Reforma de cocina en Mugardos

Publicado el Martes, 24 Marzo 2020 12:20

Hago esta entrada desde el estudio-casa, donde continuo sacando temas pendientes y planificando el regreso a la normalidad. Recuperando la actividad de la página web parece como si las cosas fueran ocupando su sitio, ordenando documentos que en el día a día de la vida ajetreada de los últimos meses van quedando postergados.

Este trabajo de reforma de una cocina en un piso de Mugardos, fué unos de los últimos trabajos en los que coincidí con una magnífica persona que formaba parte de la empresa de construcción ACR. Un hombre trabajador, muy respetuoso y siempre con una sonrisa en la boca. De esas personas de la vieja escuela que tanto se agradece tener al lado en el trabajo diario. Nadie se iba a imaginar que desde el día de su marcha se fuese a desencadenar la situación que nos toca vivir estos días, pero ni siquiera los gobernantes más poderosos puede controlar el futuro. Un saludo desde el corazón y ayudanos desde donde quiera que estés Sr Juan.

Este trabajo parte desde la necesidad de remodelar la cocina de una vivienda construída a principios de los años 80. El mobiliario se encontraba en buen estado de conservación, pero por un lado su estética anticuada y el limitado aprovechamiento por su distribución, animaban a replantear el funcionamiento de la cocina. Contando desde el minuto uno con el apoyo de Zebrano Cocinas tanto de su equipo de diseño como de su equipo comercial, planteamos una linea sobria de colores neutros que equilibrasen el espacio. Donde el color de la fruta de un simple frutero, diese las notas de contraste con el marco donde se sitúa.

Se buscó el sistema de poder readaptar parte de los electrodomésticos con los que se contaba y que estaban en muy buen estado de uso. Esto también condiciona a la estética empleada en los acabados y colores elegidos, con la finalidad de que el conjunto mantuviese un equilibrio entre lo nuevo y lo existente. El fondo de alicatado original se eliminó para dar un acabado de paramento liso y con acabado en pintura plástica lavable, que aportase uniformidad al espacio. En el suelo optamos por una plaqueta porcelánica muy homogénea que no resaltase el rejuntado y diese un aspecto de continuidad, que fuese acorde a la idea principal de que resultase una cocina que transmitiese suavidad.

En esta imagen final mostramos el proceso desde el punto de partida, cuando el cliente está ilusionado con la reforma que va a hacer, al momento en el que los clientes se empiezan a asustar de verdad cuando ven todo desmontado, y por último la imagen del resultado final cuando ya vuelven a sonreir. En reforma, este periplo es el pan nuestro de cada día.